El Despertar de la Fuerza y del mito

El despertar del mito

¿Podemos decir que El Despertar de la Fuerza tiene un argumento original? No, pero seguramente no por los motivos que estáis pensando. Podríamos hablar de prácticamente cualquier otra película pero, antes, vayamos a la concepción que tenía Platón sobre la originalidad en las narraciones.

El filósofo opinaba que cualquier argumento se incorpora a una continuidad narrativa anterior y, a la misma vez que son fruto de ese legado, acaban generando uno nuevo. Es decir, aunque se trate de historias que imiten a otras en cuanto a su estructura, realmente son historias nuevas en tanto que las vemos y traducimos narrativamente desde una perspectiva contemporánea.

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Las historias anteriores nos ayudan a anclarnos en determinados temas o estructuras que son inmortales por su condición de universales.

No hablamos aquí de adaptaciones, sino de nuevas formas de volver a la misma historia creando, a su vez, algo nuevo.

El trozo del mapa

Aún recuerdo cuando se anunció el Episodio VII y como, poco a poco, los datos fueron revelándose en pequeños detalles. Sin embargo, pese a todo el misticismo que rodeó el argumento de la película, sí que teníamos claro un aspecto muy importante: Luke Skywalker había desaparecido.

Este fue el eje principal en torno al cuál se movió todo el argumento de la película. En términos históricos, podríamos decir, sin lugar a dudas, que se trató del motor de la Historia. Todo ello traducido, en términos ahora cinematográficos, en la posesión de un mapa incompleto y la incesante búsqueda del resto para encontrar la localización de uno de los personajes más importantes de la saga, la última esperanza.

En el mundo del cine esto se conoce como un «macguffin», traducido en palabras más comunes sería algo así como una excusa argumental sobre la que se sostiene una narración o un objeto que mueve a los personajes. ¿Te suena el Arca de la Alianza en Indiana Jones o el maletín de Pulp Fiction? En palabras de su inventor, Alfred Hitchcock, sería lo siguiente:

«La palabra procede de esta historia: Van dos hombres en un tren y uno de ellos le dice al otro “¿Qué es ese paquete que hay en el maletero que tiene sobre su cabeza?”. El otro contesta: “Ah, eso es un McGuffin”. El primero insiste: “¿Qué es un McGuffin?”, y su compañero de viaje le responde: “Un MacGuffin es un aparato para cazar leones en Escocia”. “Pero si en Escocia no hay leones”, le espeta el primer hombre. “Entonces eso de ahí no es un MacGuffin”, le responde el otro».

El cine según Hitchcock de François Truffaut. 

En El Despertar de la Fuerza, este elemento es muy claro y, desde un inicio, mueve toda la trama hasta su mismo final. Este concepto es más o menos conocido por todo aquel o aquella fan que tenga cierto interés por el cine y sus detalles. Este elemento es utilizado en especial por el cine de aventuras para desarrollar toda la trama, ¿a quién no le suena una película que implique una búsqueda del tesoro en un territorio exótico? Como ocurre en los libros, este objeto o elemento, será o bien algo trivial como un maletín o bien algo trascendental como el Arca que contiene los Diez Mandamientos. La cuestión a la que queremos llegar, ¿es este concepto algo original de Hitchcock o del cine o podemos rastrear su influencia más allá?

La mitología nunca muere. Rey y los nuevos argonautas

Bien, como habréis adivinado, podemos ir mucho más allá. Hasta la propia Antigüedad de hecho. Para ello vamos a partir de una de las historias y aventuras más famosas de todos los tiempos: Jasón y los Argonautas.

Como bien resumen en una famosa página sobre mitología, Jasón fue un héroe y guerrero griego que comandó el Argo, un glorioso y legendario barco en el que viajaban como navegantes los argonautas, llegando hasta Colquis para poder obtener el Vellocino de Oro (la piel de un carnero sobrenatural).

Y es que Star Wars es un mito moderno que hace acopio de todos los mitos que le preceden para crear un envoltorio nuevo que, sin embargo, a todos nos resulta familiar porque la humanidad ha crecido con esas historias.

Si tiramos del hilo rojo (guiño al Episodio IX), podemos rastrear este tipo de aventuras, que conforman toda la saga, hasta la famosa leyenda de Jasón, una historia adaptada por Don Chaffey en la película del mismo nombre del año 1962. Este guión tomó la leyenda y la adaptó a los recursos cinematográficos de la época y resultó, junto a los espectaculares efectos especiales de Ray Harryhausen, en una obra de éxito.

Es en este punto, la capacidad de coger una leyenda clásica de aventuras y adaptarla al lenguaje del cine donde podemos encontrar el esquema o la estructura fundamental de este tipo de historias.

En la leyenda se traduce del siguiente modo: obtenemos un encargo (obtener el mapa y proteger a su contenedor, en este caso BB-8), seguimos con un viaje lleno de incidentes (la Primera Orden los persigue, posteriormente el enfrentamiento con los piratas y hasta el rapto de Rey por Kylo Ren), llegamos al destino para enfrentarnos al poseedor del objeto gracias a la ayuda de una aliada hallada entre los enemigos (Han Solo culmina su viaje frente a su hijo, Rey se enfrenta a Kylo para dar finalmente con su objetivo, Luke Skywalker y todo ello no hubiera sido posible sin la ayuda de un personaje inicialmente algo hostil como Maz Kanata, el propio Han Solo e incluso la “ayuda” de Phasma).

Este último aspecto, en la historia clásica, es el acto en el que Medea, la suma sacerdotisa, se enamora del héroe y le ayuda. El último paso, como no, es el encuentro con el vellocino de oro que, como el Santo Grial, es el portador de paz, futuro y esperanza, justo como Luke lo es al final de esta película y como nos muestra el color de su túnica.

Volviendo nuevamente a la historia clásica, podemos ver como el vellocino llega a curar la herida mortal de Medea. En el caso de Rey, es encontrarse por fin con su Destino.


Como ya estamos acostumbrados, todo el cine de aventuras se centra en los peligros del viaje y en el destino final, que no es otro que el encuentro del tesoro. Normalmente, el regreso de vuelta no suele entrar en este tipo de historias, y se centra más en las segundas partes de las trilogías. Estas historias de regreso, como habréis adivinado, están basadas en las aventuras de Ulises u Odiseo.

Y hablando de cine de aventuras, ¿os suena la película El viaje fantástico de Simbad, del año 1973? Esta película nos contaba las aventuras de los protagonistas por encontrar un tesoro localizado en una misteriosa isla que solo aparecía en un trozo de mapa.

Fotograma de El Viaje Fantástico de Simbad (1973)

Por supuesto, los protagonistas tenían que encontrar el resto del mapa para dar con la extraña isla. Los enemigos, por su parte, también trataban de encontrar los trozos del mapa como ocurre en la primera película de Indiana Jones. Estoy convencido de que podéis extrapolar el paralelismo a la película que nos ocupa y es que, salvo en detalles, podríamos estar hablando de la MISMA historia. En todas ellas normalmente se hace uso de dos ejes enfrentados o dos grupos/ejércitos enfrentados por hacerse con ese objeto para que el protagonista y el espectador no caigan en ningún tipo de ambigüedad moral al respecto y tengan muy claro quiénes son los buenos y quiénes los malos.

Si volvemos a la historia de Simbad y a su estructura narrativa básica, podemos hablar de un bando luminoso que realizan una búsqueda por motivos totalmente desinteresados relacionados con el pacifismo, el amor y el heredero legítimo al trono. En la otra cara de la moneda nos encontramos con un bando perverso que utiliza la magia (Fuerza, ejem) del aún más malvado brujo, como ya ocurriera con la magia oscura que afectó a Medea, y con motivos relacionados con la codicia y ambición (Lado Oscuro de la Fuerza).

El mito ni se crea ni se destruye, solo se transforma

Rey frente a su Destino. ¿Una nueva esperanza?

El final es más que evidente, ambos bandos se enfrentarán representados a través de los personajes más importantes, en una lucha única donde el bien siempre vence al mal.

Estos aspectos son siempre potenciados en sus versiones cinematográficas para dar más énfasis al maniqueísmo en la narración de modo que el espectador pueda identificarse claramente.

En futuras entradas analizaremos más historias clásicas para comprobar como, en el fondo, seguimos contando las mismas aventuras o desventuras pero con una carcasa diferente.

Star Wars es el mayor exponente de cómo el mito se transforma para pervivir y de cómo los temas más importantes siguen siendo aquellos que siempre lo han sido. Esta saga es, en esencia, un viaje por todas las historias.

Fuente bibliográfica para aprender más sobre el uso del cine como herramienta del mito: La semilla inmortal de Jordi Balló y Xavier Pérez. Imprescindible.


3 Comments

  1. Lo más irónico es que el género de ciencia ficción es el que más libertades creativas permite y el que en más tópicos cae… Y ya hablando del E7 en particular obviamente es un soft reboot de la saga cosa que no es algo descabellado para una película de más de 4 décadas y aunque en mi opinión creo que toma demasiado del E4 para mi gusto (y el de muchos) viéndola en retrospectiva comparada con el E8 y SOLO hay bastante cosas que funcionan…

  2. Adoro Star Wars, de hecho, ya tengo mi entrada para el Ep IX y he visto The Mandalorian, me encanta Rogue One y Solo la encuentro un western bastante aceptable (lo digo para no se me tome por otro hater más) pero la última trilogía es un despropósito. Luke se esconde y ¿deja un mapa? o ¿se esconde y dice dónde (antiguo templo jedi)? ¿por qué le falta un trozo al mapa? ¿cómo les llega? Todo se basa en buscar a Luke para que vuelva y ¡¡¡ayude!!! ¿por qué envían a una novata de la que nadie (excepto Kylo y Finn, en coma) sabe que puede usar la Fuerza? ¿por qué no va Leia? ¿por qué todos pasan de Chewie? Y lo del Episodio VIII… en fin, eso ya es de traca, especialmente la actitud de Luke (nada que ver con su personalidad), la nula aportación de Snoke (¿quién es?) o la insulsa historia de Tico y Finn (¿para qué?)
    Son pelis muy bien hechas, efectos, fotografía… geniales! con dos personajes Rey y Kylo que dan muchísimo más juego, pero con unos guiones desastrosos.

Desde este Blog se han detectado transmisiones de Real Fans de Star Wars. Recuerda ser respetuoso y no escribir spoilers. Que la Fuerza te Acompañe.

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